Un investigador de la NASA, veterano de los pronósticos del tiempo, ha desarrollado un modelo para investigar la interacción de las ondas de gravedad con las tormentas severas.
Según Tim Coleman, del Centro Nacional de Ciencias Espaciales y Tecnología (National Space Science and Technology Center, en idioma inglés), en Huntsville, Alabama; las interacciones entre las ondas y las tormentas son muy importantes. Si una onda de gravedad golpea a una tormenta en rotación, puede ocasionalmente hacerla girar más rápido, convirtiéndola de este modo en un tornado.
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Cuando una onda de gravedad empuja con fuerza sobre una tormenta en rotación, la comprime. Esto, a su vez, hace que la tormenta gire más rápido. Para entender por qué esto es así, Coleman da el ejemplo de una patinadora de hielo que gira con sus brazos extendidos. "Cuando junta los brazos hacia el pecho, comienza a girar más rápido". Lo mismo sucede con las tormentas: cuando las ondas de gravedad las comprimen, giran más rápidamente para conservar el momento angular.
"También hay vientos cortantes en una onda de gravedad y la tormentas pueden tomar ese viento cortante, inclinarlo y usarlo para incrementar su velocidad de giro. Todos estos factores pueden incrementar la rotación de la tormenta, haciéndola más poderosa y más susceptible de generar un tornado".
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2 comentarios:
Muy bellas e inspiradoras fotos. Los temas siempre interesantes. Llegué aquí por casualidad, como suelen suceder estas cosas, y ha sido una experiencia agradable. Suerte!
Gracias Ivette. Estamos para servir. Un saludo, y vuelve!
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